APE TAX

“A mí no me engañas, Mowgli, un trato hicimos yo y tú.”

A lo largo de la historia, el humano siempre ha buscado alejarse del simio.

Cuatro mil millones de años han pasado desde que salimos del caldo primigenio, y ahora una nueva forma de evolución ha comenzado.

Sin embargo, con el progreso vienen los problemas; ahora vemos que algunos de nuestros pares no son tan sofisticados como pensábamos.

La temporada del simio está aquí.

El pico de los precios y un mercado implacablemente alcista han convalidado la imprudente especulación de los traders sobre-apalancados y los yield farmers sin paciencia.

Pero no todos sus movimientos generan tantas ganancias como nos quieren hacer creer. La cultura del macho del trading financiero se magnifica por el anonimato de la red y el deseo de entretenimiento.

El ape tax siempre ha sido pagado por los que apuestan con esperanzas irreales. Sin embargo, en estos mercados la codicia puede convertirnos en un mono a todos.

Todos los ojos en los picos de los precios. “All-in” no es suficiente; incluso los que están “in” temen perderse algo más.

Generalmente los traders requieren una mezcla impredecible de suerte y destreza para conquistar los mercados, pero ahora los vientos han cambiado.

El negocio de monos paga bien durante la temporada de simios, cuando incluso el IQ más bajo puede generar las ganancias más altas. Shitcoins gamificadas y yield farms anónimos sirven como buena comida para el trader moderno que ya se ha rendido a sus instintos primarios.

Sin ape-tito por estrategia ni seguridad, los simios invierten ahora y se arrepienten luego.

Estudios de monos apostadores han ayudado a los científicos a identificar las áreas del cerebro vinculadas con comportamientos de alto riesgo.

Dos monos fueron entrenados para jugar contra un ordenador y ganar vasos de agua para tomar.

Incluso cuando ya no tenían sed, los monos seguían yendo con apuestas riesgosas, al parecer, encontraban emoción en el triunfo.

Frecuentemente asumimos que nuestra actitud ante el riesgo es siempre la misma, pero investigadores de comportamiento han encontrado que esto no es verdad - un simio puede tener una aversión al riesgo en algunas cosas y una inclinación al riesgo en otras, como los simios que usan una hardware wallet para enviar su dinero hacia un smart contract no auditado que ofrece +100,000% APY.

¿La supervivencia del más apto es una descripción adecuada, o pronto recibirán un premio Darwin?

Mientras tanto, fuera del ruido y sin las distracciones de la violencia de las gráficas, los desarrolladores siguen trabajando.

Están naciendo nuevos primitivos financieros; el origen de su especie.

Primos cladistas de sus contrapartes tradicionales, se paran sobre los hombros de gigantes. Sin embargo, pronto seguirán otro camino.

Aunque su creación puede durar meses o años, una vez que nacen, la naturaleza del crypto no permite tiempo para su nutrimento. Nuevos protocolos se crean directamente en el mercado donde bulls y bears, a la alza y la baja, deciden su destino.

Este darwinismo digital sucede en blocks más que dentro de milenios.

Hay sólo dos cosas seguras en la vida: la muerte y los impuestos.

El ape que llega primero consigue el APY, pero todos los que le siguen son presa fácil cuando los gorilas expectantes hacen dump a sus tokens.

La gamificación del yield farming es la representación más pura de la teoría del “tonto más grande”.

Compra el token - recibe más tokens, véndeselo a los tontos que todavía no han ni empezado.

Fumar mata, beber es malo, yield farming es riesgoso - los avisos son inútiles, la droga es demasiado potente.

Los apes no pueden parar.

Una vez rekt, su adicción incrementa a la par que intentan recobrar su dinero.

Si otros pueden hacerlo, ¿por qué no ellos?

Van all-in, todo dentro, el dinero está justo ahí; farm, dump, farm, dump...

¿qué

podría

salir

mal?

Nuestro nicho de la comunidad crypto generalmente está de acuerdo en que tokens como HEX son una estafa; la mera asociación daña tu reputación. Resulta extraño que estemos abiertos a participar en planes similares cuando el token viene con nombre de alimento y se presentan como yield farming.

Cuando tú ganas, otro pierde.

Cada estafador tiene una meta, cada “moonshot” tiene sus “bagholders”.

No te vuelvas un mono por monedas abiertamente promocionadas online.

O te están aplicando un pump-and-dump o no vas a estar listo para hacer el dump cuando llegue el momento.

“Y dame luego luego, del hombre el fuego, para ser como tú.”

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